En el Restaurante La Calma no hay personas aleatorias. AqBienvenidosuí trabajan solo aquellos que han sido conquistados por este lugar, que están enamorados de su trabajo y que reciben con alegría a cada persona que entra en La Calma.
Creemos que incluso en el Restaurante más acogedor, con los platos más exquisitos, es imposible prescindir de un empleado dedicado a su trabajo.
Por cierto, pregunten a cualquiera de nuestro equipo, que estarán felices de poder compartir con ustedes su opinión.